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martes, 7 de febrero de 2012

Crítica de discos: Aborted - Global Flatline (2012)


Volvemos a la carga tras este parón debido a las obligaciones académicas de todo universitario, y que mejor manera que con uno de los discos a los que más me he enganchado durante esta dura época, y por que no decirlo, el que más esperaba. No es de extrañar, el tema que da título al disco salió como single y se me hizo la boca agua, si a esto le sumamos The Origin Of Disease que también salió como adelante, aumentaron aún más si cabe, las sospechas de que Aborted tenían una auténtica cafrería bajo las manos, que hiciese olvidar la decepción que supuso Strychnine.213, debido a su escarceo con el Deathcore (que, aún así, no me pareció un disco tan abominable como lo pintaban algunos, muchas bandas de Deathcore darían un brazo con tal de ser capaces de hacer un disco como ese).
Poco tiempo tardé en darme cuenta que mis expectativas no habían sido defraudadas, sino superadas y con creces. Estamos ante una animalada tan comparable al Goremaggedon, y todo el que sigue a esta banda sabe que eso son palabras mayores. Obviamente no es que esto sea una continuación exacta de dicho álbum (o como gusta decir tanto hoy día: evolución natural), no tiene ese "muro de sonido" característico del Brutal Death, y lo ha cambiado por un Death Metal europeo más ortodoxo, y le sienta muy bien. ¿Hay algo que recuerde al infame Strychnine.213? Sinceramente, muchas vueltas vas a tener que darle a este disco, y vas a tener que mirar con lupa cada riff, que como mucho encontrarás cierto riff puntual de parecido, y amigo mio, si has llegado a ese punto para pillarle los fallos, es que le tienes mucho odio a esta banda.
Global Flatline es toda una demostración de cómo debe hacerse el Death Metal puro y duro hoy día. Desde la patada en la cara que es Global Flatine, que comienza con esa introducción tan inquietante, pasando por   Coronary Reconstrucion, Fecal Forgery (por cierto, vuelven los samplers de películas de terror en los temas, aunque de una manera mucho más breve) o From A Tepid Whiff. Por poner sólo unos ejemplos, Como vemos, el Death Metal sin experimentos es lo que predomina, cosa que en esta banda se echaba mucho de menos. No obstante hay ciertos temas que ponen el punto de variación en el disco, para no hacerlo tan monótono. Como The Origin Of Disease, que sirve para recordar que el Grindcore sigue muy presente en estos belgas, el riff principal de Of Scabs And Boils con cierto aire Hardcore, o los guiños al Doom Metal con Expurgation Euphoria que nos coge totalmente por sorpresa con su inicio al piano. Un medio tiempo oscuro que nunca ha estado muy presente en la discografía de los belgas, o el tema que cierra el disco: Endstille, el corte más melódico de todo el disco, incluso se podría decir que el más tranquilo, pues nunca termina de estallar, algo que no es malo, sobretodo cuando llevamos a nuestras espaldas bastantes temas que han sido estallidos puros. Endstille es todo lo contrario, irá desapareciendo poco a poco, finalizando el álbum con la tranquilidad que no tuvo al empezar.
En cuanto a la técnica, poco que hablar, "Svencho" siempre ha sabido de donde escoger los músicos, y como siempre tenemos solos intrincados, con mucho uso de trémolo como podremos oír, abundancia de blast-beats, (aunque, ojo, no son continuados como en un álbum de Brutal Death) y mucho cambio de ritmo. Esto, sumado a la corta duración de las canciones (casi siempre en torno a los tres minutos) no dan cabida al aburrimiento. Cada tema es un torbellino que apenas deja momento para el respiro, salvo los momentos antes citados. Aunque lo más importante es que han recuperado la credibilidad que habían perdido desde hace unos años. Un disco hecho para captar a los amantes de la vieja escuela, que son los que al final, siempre permanecen.

Nota: 9