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sábado, 10 de julio de 2010

Que les jodan.

Escribo esto enfadado, cabreado, "en caliente" como se suele decir, me la pela, ha sido ver la noticia y cagarme en esta ciudad de mierda en la que vivo, o como lo llaman otros: Sevilla.
Se cierra la Sala Q, no sé por qué, será esta puta crisis que nadie soluciona, que ha dejado a 4 millones de personas en el paro, "que le vamos a hacer" direis, no, los heavys en esta ciudad siempre hemos sido los últimos, a nadie le importamos, con eso podemos convivir, pero dejarnos sin uno de los sitios donde estábamos a gusto, uno de estos lugares, ESO SI QUE NO , puede que la acústica fuera mala, pero era el único sitio donde traían grupos bueno (Arch Enemy, Axxis, Primal Fear, Behemoth...) y el ayuntamiento, otra vez más ha pasado de nosotros como la mierda, en el 2009 no hubo Mingatron, porque esa panda de chupapollas se rajó en el último momento y nos dejó sin parque donde se iba a organizar todo en el último momento, este año se organizó en la Sala Q, pagando y gracias, porque si no, otro año igual, a pesar de esto el festival se organizó perfectamente, gracias a voluntarios que dieron su tiempo gratuítamente para que los demás pudiéramos tener un festival digno, "Sevilla la ciudad de las personas" me río yo del mensaje, por lo visto nosotros somos animales.
Las discotecas hacen mucho más ruido, la mayoría está en plena ciudad y muchas no dejan dormir a los vecinos, en cambio la Sala Q está en un polígono y no molesta a nadie, pues nada, seguro que si una de esas discotecas de pijos estuviera a punto de cerrar ayuda no les iba a faltar. Un día nos impediran estar en el río (zona donde los juntamos practicamente todos los metaleros y algunos frikis) y tampoco descarto que otro día cierren el Guilles, por cualquier soplapollez, pero sé que la Sala Q no es el primer sitio que se cierra y sé que nos adaptaremos, sobreviviremos y seguiremos dando por culo, que les jodan, a los políticos del ayuntamiento, a los curas, a los capillitas, a los fachas, a todos esos que nos consideran mal, porque estoy harto de esta puta ciudad, y a veces pienso que deberíamos hacer una revolución violenta, pero eso sería peor, porque les daría el gusto de decir que somos violentos, ahora comprendo un poco más a aquellos jóvenes noruegos de principios de los 90...