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domingo, 28 de junio de 2015

Deconstruyendo a Morbid Angel


Hace unas semanas leíamos una noticia en Blabbermouth que anunciaba el regreso de Steve Tucker a Morbid Angel, 13 años después de su marcha para la reunión con David Vincent. Para muchos una buena noticia, los discos con Tucker mostraron a una banda deseosa de hacer cosas distintas, innovar… en su línea, y que Tucker tenía un registro más grave si cabe que el de Vincent (algunos dijeron que Morbid Angel se aproximaba al brutal death metal por entonces), además de haber cumplido sobradamente como frontman. Además, Vicent fue tachado como el culpable de aquel nefasto Illud Divinum Insanus, aunque a eso nos aproximaremos más tarde. En pocas palabras, una noticia completamente inesperada y sorpresiva, pero bien acogida.

Ese mismo día, Tim Yeung, al que tampoco le tienen demasiado cariño los fans tradicionales, simplemente por ser el sustituto de Pete Sandoval, dejaba la banda alegando diferencias financieras, y como he dicho antes, luego volveremos a ello.

Lo divertido de la historia es cuando el propio David Vincent dice que, en lo que a el respecta, sigue en Morbid Angel, y nadie se ha molestado en decirle ningún cambio. Steve Tucker, con bastante sorna, a su vez en su propio perfil de Facebook decía que tampoco tenía ni idea de qué pasaba con David y que se la sudaba, el estaría en Morbid Angel. Mientras, Azagthoth, callaba.

Para terminar de rematar la cosa, Thor Anders Myhren, el guitarrista con menos protagonismo que ha tenido jamás el grupo, anunciaba también que se marchaba de la banda, para continuar con Myrkskog, la banda a la que “realmente pertenezco” (y es que la banda noruega de brutal death lleva desde 2002 sin sacar nada). El culebrón se resolvía de manera relativamente sorprendente. 3 días después de sus primeras declaraciones, David Vincent anunciaba su marcha de la banda, y animaban a los fans que siguiesen apoyando al grupo. Al parecer, la salida parece muy amistosa, sin dramas ni sin tener dos Morbid Angels, uno de ellos con prefijo, como Entombed A.D. o Venom Inc.

No podemos decir aquello de que se veía venir, porque ha sido bastante inesperado, pero tampoco podemos contar que era algo muy improbable y lejano. Y es que Morbid Angel son una banda a la vieja usanza: poca comunicación entre los miembros del grupo y del público, manteniendo ese aura de “misticismo”. Pero la verdad es que la banda de Florida ha sido siempre una de esas hidras de dos cabezas que siempre se atacaban al cuello.

Volvamos a 1995, con la salida del disco Domination, que representó ciertos cambios en lo musical, y sobretodo en lo lírico, con respecto a Altars Of Madness, Blessed Are The Sick (que en su día también fue criticado por incluir pasajes de música clásica, por cortesía de Trey, un gran aficionado de este género) y Covenant. Pero esta vez fue la primera vez que la opinión sobre un disco de los de Tampa estaba más dividida. Influía también que el Death Metal puro y duro dejaba de tener la relevancia de la que había tenido en estos últimos años. El Death Metal de Gotemburgo comenzaba a imponerse, y el Black Metal también tenía una difusión bestial gracias a la quema de iglesias noruegas. Aunque si bien todo había parado el año anterior, con la muerte de Euronymous, las cosas no se difundían tan rápido como ahora, y menos en un mundo tan (relativamente) marginal como el metal extremo.

Lo sorprendente sería que en 1996 dejaría la banda por unirse a Genitortures, el grupo de rock industrial de su mujer (tiran más dos tetas…), pero había muchos más problemas ocultos, que ambos, como era menester en su época (ahora cada uno tiene su perfil de Facebook/Twitter para echar mierda), airearon a través de entrevistas.

El lugar de intercambio de golpes sería el antiguo MTV Headbanger’s Ball. Vincent, un tipo que, como reconocía Trey, tenía don de gentes, lanzó en este espacio, el mismo año en el que se fue por primera vez, una serie de puyas. Le pidieron que comparase Covenant y Domination, para el bajista, el segundo tenía una mejor producción. El guitarrista, en cambio, dos años después en el mismo medio, decía que la producción era “estéril, las baterías suenan demasiado sampleadas” debido al uso de metrónomo para hacer el tiempo “demasiado perfecto”.  En pocas palabras, un disco poco natural y sí muy artificial.

Siguiendo con las comparaciones, Vincent decía la típica frase tópica de que “las canciones han evolucionado a una nueva etapa que abarca una etapa mayor de lo que hemos tenido antes”. Palabrería para defender el nuevo opus, lo normal y lógico. Esto incluía salir un poco de los temas ocultistas a los que el grupo nos tenía acostumbrados ¿Era David el responsable de ello? Tal y como le pregunta el periodista. Trey no se corta un pelo a la hora de afirmarlo, afirmando incluso que fue el bajista quien escribió todas las letras. Además, añadía que las hacía en el último minuto, y que además le advirtió de que quería que la línea lírica fuese la misma que llevan siguiendo desde Altars Of Madness. El guitarrista se desfogaba ante las cámaras diciendo que las letras no tenían calidad. La cosa no acabó ahí, pues dejó caer que David intentó meter elementos industriales en el disco (lo cual explica muchas cosas), y él no le dejó.

Llegados a este punto, puede que alguno de vosotros se pregunte, ¿por qué le dejó cambiar tantas cosas? Trey se excusaba en la ignorancia, de dedicarse simplemente a su guitarra y no echar un ojo a lo que hacían David, pues una banda es un conjunto de personas remando en la misma dirección. En otras palabras, no hacía lo que él esperaba.

Esto es mucho divagar, pero se intuye cierta actitud dictatorial y manipuladora por parte de Trey “he delegado mis acciones en otros y por no vigilarles mira lo que ha pasado…”, “yo no sabía, pensaba que los otros eran como yo…”. Lo curioso es que esas cosas las dijese en el 98, cuando todo ha pasado, en vez de afrontarlas en su momento, o más bien, en el estudio, con tantos cambios de los que él no tenía ni idea. Pero, sin “santificar” a Vincent, lo tomaron un poco de chivo expiatorio.

Seguramente, más de uno ya haya visto las similitudes con su disco más polémico, el Illud Divinum Insanus. Es como si todo lo “malo” de Domination lo hubiesen llevado al límite. Personalmente, yo sí soy fan del Domination, pero no del I.D.I. al que considero un mal disco de metal industrial. Pero, si los cambios del álbum del 95, eran relativamente pequeños, pues el sello de identidad de la banda no se vio trastocado y Trey no se dio cuenta de nada, ¿entonces cómo no se dio cuenta de que un disco completamente distinto a una banda que fundó el, se estaba gestando delante de sus narices, en serio fue ignorancia de nuevo, otra vez se la colaron, pero de manera aún mayor? Un experimento tan radical, en mi opinión, no tenía lugar en un grupo tan consolidado, pero delegar toda la culpa en sólo una persona, es, cuanto menos, sospechoso. Es creíble que Vincent fuera la mano creativa principal en Illud, pero Azagthoth no tiene un pelo de tonto, y tan en desacuerdo no estaría con el disco.

El grupo no estalló en pedazos en 2011 por varias razones: Dinero, pues Morbid Angel no da para comprarse un Porsche, pero sí para vivir de la música, porque sus dos cabezas, en el fondo, querían hacer lo que hicieron, y más sabiendo que una obra así no iba a gustar a su parroquia. Porque, admitámoslo, los fans de Morbid Angel son como los de Cannibal Corpse, quieren un sonido y que no se salga de esos parámetros. 

Una de las cosas más curiosas de todo este asunto, es la carta de despedida de Vincent (y volvemos a divagar cosa mala), que no suena a malas tensiones, sino a aquel que, no le queda otro remedio que abandonar un sitio en el que está a gusto. Lo que demuestra que, por un lado, la banda sigue siendo ese ser policéfalo y caníbal, donde los mismos problemas se mantienen (de ahí eso de las “incompatibilidades de trabajar juntos”), y por otro lado que, lo único que ha cambiado, ha sido la manera de afrontar el tema, de manera bastante más adulta y amigable.

No sé bajo qué términos se produjo la reunión de 2004, pero, si no estallaron problemas antes (que sepamos), es debido a que el principal tema por el cual se enfrentaron ambos, estaba ausente, que era la creación de un disco. Mientras que todo eran giras y revivir los viejos tiempos, todo iba como viento en popa. Pero una vez dentro del estudio, los antiguos fantasmas retornarían, aunque, repito, todo esto son suposiciones. Pero no es descabellado pensar que, desde 2011, las cosas se pusieron feas en el seno de los ángeles mórbidos, que viendo que se aproximaban hostias en el estudio, lo mejor era que cada uno siguiese por su camino (aunque Trey tiene la sartén por el mango).

No soy capaz de intuir qué puñetas pasó en ese lapso de tiempo, por qué la incompetencia de llamar a un nuevo cantante, mientras el otro sigue aún en la banda, o al menos no se le ha comunicado su salida.

Desde luego, parece que casi toda la formación ha salido por la puerta de atrás. Tim Yeung, nunca se ganó la confianza de muchos, pero por factores que rozan lo extra musical. Tal y como dijimos, su mayor losa fue ser el sustituto de un Pete Sandoval, que, según David Vincent no volvería a Morbid Angel debido a su conversión al cristianismo. Yeung fue un mercenario desde 2010 hasta 2013. Sus motivos para dejar la banda, financieros, tal y como dice. Lo cual da la sensación de que nunca dejó de ser en el fondo, considerado como un mercenario. Ya sabéis "que si me debéis X meses, que si me íbais a pagar por Y". El dinero siempre es un tema peliagudo...

No puedo, sino sentir cierta lástima por Thor Anders Myhren, aka Destructhor. Según sus declaraciones, ellos querían trabajar con "alguien más local" y aunque, la separación no fue de mala manera (o eso afirma), que diga que su banda Myrkskog es donde realmente pertenece, nos hace pensar que siempre se sintió en un segundo plano, aunque agradecido por poder tocar con tales leyendas como los Morbid Angel. Y que, si seguía viviendo en Noruega estando en Morbid Angel, económicamente debía ser una pasta, pero eso ya es otro tema.


Ahora, pretendientes para ocupar las bajas, no les van a faltar. La única duda que tengo es, ¿Tucker ejercerá de guitarrista en esta ocasión, o volverá como bajista? Yo apuesto por lo segundo, pero cosas más raras se han visto. ¿Quiénes serán los próximos en entrar en el grupo? Hagan sus apuestas.

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